La elevación de lípidos (o grasa) en la sangre predispone su acumulación en nuestras arterias. La mayoría de los pacientes aparentemente sanos que acuden por infarto del miocardio tienen colesterol elevado en la sangre sin conocimiento previo.
Para el estudio de las dislipidemias contamos con el mejor equipo médico y de laboratorio. Este padecimiento es mucho más complejo que la sola medición y cálculo del colesterol total. Durante el tratamiento y seguimiento de nuestros pacientes, contamos con atención multidisciplinaria y ajustado acorde a cada paciente.
