Consiste, al igual que el cateterismo cardiaco, en la utilización de un catéter a través de la muñeca derecha para localizar las arterias coronarias e inyectar medio de contraste para el estudio de la anatomía de dichas arterias.
Durante el procedimiento es posible detectar oclusiones dentro de las arterias, provocadas por acumulo de colesterol y calcio que producen el típico dolor de pecho o “angina de pecho”.
Es el procedimiento de primer elección para la atención urgente y temprana del infarto agudo del miocardio, durante el cual es posible implantar dispositivos que recuperan la anatomía de las arterias coronarias.
Dichos dispositivos son llamados “Stent”, fabricados con aleaciones de cromo-cobalto en su mayoría y recubiertos de medicamento que evita la reoclusión de las arterias.
Contamos con los últimos dispositivos de cuarta generación hechos de un polímero de ácido poliláctico, que es completamente reabsorbible a los dos años de la colocación dejando la arteria coronaria libre de metal.
Para el diagnóstico preciso e intervención coronaria contamos con el equipo más moderno.
Somos especialistas en técnicas de diagnóstico sumamente precisas como el ultrasonido intracoronario y la tomografía de coherencia óptica intracoronaria. Dichas técnicas permiten visualizar en tiempo real las oclusiones dentro de la luz de las arterias coronarias, obteniendo así imágenes reales del vaso, que ayudan a identificar las oclusiones realmente significativas y que permiten evitar la implantación no necesaria de stents.